16 noviembre, 2008

Aquí, seguro de hacer lo incorrecto.

Por casualidades de la vida hallóme aquí otra vez, después de bastante más tiempo del que esperaba.

Entre otros menesteres últimamente escucho música que me resulta extraña. Bunbury es un ejemplo (por él va el título, por su magnífica canción incluida en 'Hellville deluxe').
Héroes me encanta pero eso entra dentro de la normalidad. Pero Bunbury y sus canciones con el toque julioigleisiástico... aún me asombro en ocasiones saliendo de mi propio cuerpo y viéndome tararear cosas del tipo "quiero que seas feliiiiz aunque no seaaa coooonmigooo".
No doy abasto en realidad con la música nueva que llega a mis manos o y con la que se me ocurre poner a bajar.


En otro orden de cosas (me parece feo volver sin traer nada nuevo), me saqué el carné. Todito a la primera, tampoco me ha costado tanto... menos un episodio que quedará para mis Anécdotas estúpidas de persona torpe y despistada a más no poder... Sí, el día que me iba a examinar me presenté con DNI caducado... pero bueno no me corrieron convocatoria ni nada y a la semana siguiente con el maldito documento calentito aprobé.


Creo que en este recuento de cosas tontas de los últimos tiempos tiene una mención muy especial el motivo que me ha alejado de esto, en su gran parte. La facultad. La facultat de Psicología de València está tomada por las tiendas de campaña, los sacos de dormir y las pancartas a cual más ingeniosa en contra del proceso de Bolonia.
Cada poco salimos de manifestación y la verdad es que parece que la liamos bastante -el pasado jueves fuimos unos 4000 dejándonos la voz y las piernas-, aunque como siempre, las cosas llegan tarde.
No hay vuelta atrás, amigos, nos la han vuelto a endiñar a lo grande. Pero bueno, no me apetece extenderme, no estoy muy reivindicativa a estas horas con esta gripe y este agotamiento. Otro día quizás me extienda más.

Respecto a la carrera, no, no es lo que me esperaba. Es cierto que me metí un poco a lo loco y es cierto que la idea que se tiene por lo general de lo psicología -supongo que como en todas las disciplinas- no se parece en nada a la realidad. Me gusta, sí, pero el primer curso es bastante pesado, bastante teórico...
Mi clase no está mal, más preocupados -como buenos universitarios que somos- de salir todos los jueves, y de ir de quintos, que de ir a clase... Pero sin duda esa es una de las cosas que más ansiábamos, esa falsa libertad que creemos tener.


Y en fin, la vida continúa, el mundo sigue girando y yo... odio el frío.
En estas épocas suelo estar constipada, suelo tener alguna extremidad congelada sin motivos y suelo estar triste, soy algo débil para estas cosas qué le vamos a hacer. No me gustan el otoño ni el invierno, ni la lluvia, ni el frío, ni que anochezca pronto, no soy nada poética. Siempre he sido más práctica que poética.

Y es cierto que desde el verano vivo una época relativamente dulce. Las fiebres del enamoramiento nos suelen atontar, sí, nos dan algo de calor, pero si esas fiebres vienen acompañadas de duras dosis de realidad, todo vuelve a ser menos poético.
Siempre he pensado que yo no valía para esta clase de cosas, observaba a los hombres como un modo de diversión, de enriquecimiento, de autosatisfacción... Y cuando eso cambia te preocupas, te dices "¿me estaré haciendo vieja?", "¿resultará que después de todo soy medio normal?".
Pero no, vuelvo a la realidad y me digo, qué coño, tu historia -como no podía ser de otra forma- es compleja, está llena de rarezas... te gustan las cosas complicadas, con miga.

Al final igual sí que soy un poco poética, porque siempre pensé que el amor debía ir acompañado de estas viscisitudes, las cosas fáciles, amigos, no valen.



Espero volver en breve y contar menos mierda, hasta pronto.

2 comentarios:

Gattsu dijo...

Cierto es que el amor da ese calor que nadie espera sentir. Cierto también que pensaba que el amor tampoco me llegaía. CIerto que las cosas no son fáciles y será precisamente por eso por lo que me gustan tanto. ¿Será que nos estamos ahciendo viejos?
Ya no lo pregunto, lo afirmo y se que hay alguien que sabe con quien me gustaría llegar a la respetable edad de nuestros abuelos. Y necesito conseguirlo porque... La vida es menos aburrida desde entonces xD

Nekemi dijo...

Que bonito resumen de los últimos días de tu vida xD

El amor es algo que nubla los sentidos y pone una venda alrededor de los ojos, para que no veas nada más... si se te pasan los efectos de la droga no es nada malo, solo es realidad =)

Un Beso (K)